«Álava es un territorio de oportunidades. Crece y va a seguir creciendo en 2020 en recaudación, en economía y en empleo. Hay que ver el futuro con precaución, pero también con optimismo». Frente al temor a una recesión en Alemania, al ‘Brexit’ en el Reino Unido, a los aranceles anunciados por Estados Unidos a productos como el vino e incluso a la repetición de las elecciones España, aspectos todo ellos que contribuyen a «crear incertidumbre», Ramiro González esbozó un escenario en el que Álava sale bien parada. «Es un territorio de estabilidad y seguridad forjado a golpe de esfuerzo colectivo, impulso público y cohesión social y así seguirá siendo», enfatizó.
Así lo reivindicó ayer el diputado general en el Foro Empresarial de Álava organizado por EL CORREO junto a Laboral Kutxa y BSK Legal&Fiscal. El acto, que contó con la presencia de los principales motores de la sociedad alavesa y muchos de los más influyentes responsables políticos, empresariales e institucionales de Euskadi, fue inaugurado por el presidente del periódico, Enrique de Ybarra; el de la entidad financiera, Txomin García; y el socio-director del despacho jurídico BSK, Ramón Solórzano. El formato elegido fue un coloquio-entrevista con la directora del diario en Álava, Zuriñe Ortiz de Latierro, en el que los invitados pudieron realizar sus preguntas al jefe del Ejecutivo foral. Lo cerró José Miguel Santamaría, director de EL CORREO, quien remarcó el orgullo de la cabecera tras más de siete décadas de servicio permanente a los alaveses.
El máximo mandatario foral fue raudo en poner sobre la mesa las fortalezas de un territorio que sí, es el más pequeño de Euskadi en población, pero «el más industrial» y «el más exportador», dijo, antes de recordar que un tercio de su PIB proviene de la industria y un 60% de lo producido aquí se vende fuera, una cuota sin parangón. Con estos atributos, opinó el jefe del Ejecutivo, Álava puede desplegar la «máxima ambición» para «liderar Euskadi en algunas materias». No desde la «competición» con otros territorios, sino desde la «colaboración», matizó.
Pese a los nubarrones externos, González vislumbra en el horizonte un futuro esperanzador y de crecimiento. La previsión de recaudación de la Hacienda foral en el cierre del año «esta en la línea positiva de los últimos meses» y de cara a 2020 también los pronósticos son optimistas desde el punto de vista de ingresos fiscales. «Vamos a seguir creciendo». Hoy se conocerán las cifras en el Consejo Vasco de Finanzas y González quiso esperar a que sean ratificadas para publicitarlas. En este escenario, que además tendrá continuidad el próximo año, el diputado general apostó por «distribuir el crecimiento» para que llegue al conjunto de la sociedad. «Veo el futuro con precaución pero con optimismo».
El descenso del paro en 584 personas en el último mes es otro dato relevante para el jefe del Ejecutivo alavés, que confía en seguir con esta inercia para conseguir pronto que la tasa de desempleo, situada ahora en el 11,6% según los últimos datos de Lanbide, baje del 10%.
Las empresas buscan trabajadores y González recordó que desde la patronal SEA Empresas Alavesas trasladan la necesidad de 6.000 profesionales este mismo año. Pero no cualquier perfil, sino con una cualificación técnica para hacer frente, por ejemplo, a los retos de futuro a los que se enfrenta la industria. La planta de Mercedes-Benz, motor económico del territorio y también la principal industria vasca, es según González un «ejemplo» de la apuesta por la formación y la innovación, ámbitos en los que la Diputación trabaja de forma conjunta con la factoría. También en la búsqueda de suelo industrial para ampliar sus instalaciones. «Estamos hablando de la primera industria de Euskadi», recordó en varias ocasiones, que ya está haciendo una reflexión sobre el futuro de la automoción en aspectos como la transición el coche eléctrico o el uso de motores diésel. «Ha habido declaraciones muy desafortunadas», dijo el diputado general, en referencia a los mensajes que demonizaron los motores diésel en fechas recientes. En Álava, «hay que colaborar para que el sector automovilístico –clave para que Mercedes y Michelin sigan siendo empresas tractoras de la sociedad alavesa– tenga el futuro garantizado».
«Álava lo tiene casi todo»
El presente en el territorio es «próspero», la actividad industrial y económica «mejora» y la sociedad alavesa «ha sabido estar en la vanguardia de los derechos sociales», destacó Enrique de Ybarra, quien resaltó con orgullo que «Álava lo tiene casi todo». En este sentido, Txomin García, presidente de Laboral Kutxa, incidió en la apuesta por la sostenibilidad como elemento de desarrollo para el conjunto de la actividad empresarial, mientras que Ramón Solórzano reclamó la colaboración público-privada para «generar eventos de referencia internacional que apuntalen nuestras empresas tractoras y visibilicen a los llamados campeones ocultos», compañías quizá con menos reconocimiento público pero líderes mundiales en sus sectores.