• La popular cata ciudadana regresó a Logroño tras su celebración en San Sebastián, Bilbao y Santander
  • Unos cuatro mil asistentes disfrutaro de la undécima edición de la degustación de vinos más popular con 19 bodegas de Rioja 

El último encuentro del Riojano Joven y Fresco fue todo un éxito. El evento se despidió el pasado 14 de julio con una acogida de miles de personas que llenaron las calles del barrio logroñés Siete Infantes. Una vez más, volvió a ser el núcleo de la capital riojana y adultos de todas las edades, pero sobre todo jóvenes, disfrutaron de la cata que ofrecieron 19 bodegas de la Denominación de Origen Calificada Rioja.

Desde las seis de la tarde comenzaron a llegar asistentes para adquirir sus tickets y hacia las siete, hora prevista para el comienzo del acto, estos se dispusieron a canjear su bono por las copas serigrafiadas y por las cinco fichas que debían entregar en las carpas donde se instalaron las bodegas para poder probar los vinos escogidos. Además, recibieron un mapa de ubicación de las bodegas y de los establecimientos de productos artesanos para acompañar los deliciosos vinos.

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Aprovechar una tarde veraniega en buena compañía con una copa en la mano era la expectativa de los más de cuatro mil asistentes que acudieron a un evento cultural, que ya es seña de identidad entre el público más joven de La Rioja. La jornada también fue un acierto para todos los que hacen posible que esta cita se celebre, entre ellos Javier Merino, el concejal de Alcaldía, y Jóvenes, y el director general de Nueva Rioja S.A., Javier Doval. También estuvieron presentes responsables de lomejordelvinoderioja, organizadores del evento, así como algunos de los colaboradores y los representantes de las bodegas participantes, que con un buen brindis celebraron el éxito de la undécima edición.

Los amantes del vino disfrutaron de la ocasión de descubrir la calidad de los vinos menos conocidos en sus variedades de blancos, rosados y claretes, jóvenes, de crianza y reserva. Del mismo modo, también pudieron catar los vermús propios de cada casa. Una excelente apuesta por las bodegas de todas las comarcas de la Denominación, desde la Rioja Alta a la Baja y desde la Rioja Alavesa hasta la Ribera Navarra: Aradón, Manzanos Wines, Marqués de Terán, Carlos Serres, Viña Bujanda, Street Wines, Domus Dei, Marqués del Atrio, Oneca, Viña Laguardia, Corral, Riolanc, Nuestra Señora de Vico, Ramírez de la Piscina, Murillo Viteri, San Cebrín, Viña Encinilla, Thalión y Fuenmayor.

Se puso así punto y final a una edición con numerosas jornadas por el norte de España. Santander, Bilbao o San Sebastián fueron algunas de las ciudades que acogieron esta iniciativa cultural que tiene como objetivo que los jóvenes se interesen y aprendan a diferenciar las variedades y características de los vinos riojanos. Así como fomentar su consumo, siempre con moderación y responsabilidad.

Y como en otras ediciones, estas bodegas estuvieron acompañadas por diferentes establecimientos de pinchos y aperitivos que hicieron las delicias de los asistentes, entre ellos Embutidos Pisón, Pafritas (patatas fritas), Flor y Nata (dulces y pasteles) y patatas asadas de Viña Ilusión.

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