Hace tiempo que la barrera cromática que imponía el azul para los niños y el rosa para las niñas quedó hecha añicos y, sin embargo, pervive la idea de que esos pequeños convertidos en adolescentes elegirán sus estudios en función del género. Ellas preferirán las letras y ellos escogerán un camino más técnico, según la teoría de los clichés. «Hay que deshacerse de las barreras mentales, y nosotras somos las primeras que nos las ponemos», advirtió Pilar Albiac, actual consejera de Vallourec y exvicepresidenta de Airbus, que ha ejercido de «primera mujer» en diversos puestos y que inauguró la jornada Women in Progress organizada por EL CORREO bajo el lema ‘Mujer, empleo y tecnología’. Como ella, otras profesionales destacadas de ese ámbito compartieron sus experiencias y derribaron estereotipos en la cita.
Sus relatos se transformaron en una reivindicación de la capacidad femenina para desarrollar una carrera en este sector. «Las Humanidades son importantes, pero es en la ciencia y en la tecnología donde la presencia de las mujeres es aún muy baja», indicó María Goti, gerente de EL CORREO en Álava. El mensaje llegó a más de 300 alumnos de la ikastola Olabide, San Viator, Carmelitas Sagrado Corazón, Egibide y Presentación de María que se cuestionan hoy a qué quieren dedicar su futuro. Albiac recordó a estos estudiantes que «la paridad no es más justa, sino también más eficaz» y que, a veces, toca «forzar» el sistema de cuotas para que las mujeres se hagan con el espacio que les corresponde.
Jorge Guelbenzu, director general de Infoempleo, mostró su «respeto» a aquellas que «tuvieron la valentía en un entorno hostil» de montar una empresa, dirigir una multinacional o formarse como ingenieras en unas aulas donde eran minoría. La tasa de paro femenina es hoy tres puntos superior (21,4% frente a 18,1%) y sólo el 31% de las mujeres ocupa puestos de liderazgo a pesar de que «fomentar la igualdad» favorece, dijo, la aportación de ideas, la motivación de los empleados o el compromiso con el proyecto laboral. Sin embargo, «el 50% de la población no está representado en la ciencia y la tecnología», lamentó María Luz Guenaga, responsable de la unidad de investigación Deusto Tech Learning, consciente de lo «difícil» que resulta acabar con los estereotipos. «Con seis años ya asociamos que las personas brillantes son del género masculino. No, chicas, nosotras también somos listas», alentó.
La jornada Women In Progress, en imágenes
«Somos capaces»
La defensa de la riqueza que aporta la diversidad, también de sexos, apareció entre los criterios compartidos por los ponentes de la jornada presentada por la periodista Almudena Cacho donde se animó a las estudiantes a «sacar pecho». «Nos cuesta convencernos de que somos capaces», asumió la experta en comunicación Teresa Baró que, tras 15 años como profesora de Lengua, ofreció las claves para hablar bien en público. «Todavía hay una herencia sobre el papel secundario de las mujeres. Aparecer en los medios de comunicación, ir a congresos, es una forma de romper ese techo de cristal», apuntó.
El encuentro donde los escolares pudieron plantear sus dudas fue clausurado por representantes institucionales. La consejera de Empleo y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, reclamó a las mujeres que «no se autoexcluyan» de las carreras científicas y tecnológicas e insistió en que «no todas debéis ser universitarias, más del 95% de quienes salen de FPencuentran empleo». El diputado general, Ramiro González, enfatizó en esa línea el potencial industrial de un territorio «rico porque tenemos personas muy formadas». «Os necesitamos a vosotros y, especialmente, a vosotras», comentó. Y el alcalde de Vitoria, Gorka Urtaran, alertó, eso sí, de «la brecha» que soporta aún el colectivo femenino en diversos ámbitos, sobre todo, «en el mercado laboral».