El pasado 25 de octubre era un día clave en la agenda política, sobre todo cuando, a partir de las cinco de la tarde, arrancaban a la vez los plenos en el Senado, para analizar las medidas propuestas por el Gobierno de España para aplicar el artículo 155; y en el Parlament, con el mismo objetivo. En este sentido, el líder nacional socialista, Pedro Sánchez, que participó en el Foro Económico de El Norte de Castilla, dijo que “la desigualdad (entre territorios) no puede ceñirse a la confrontación por muy atractivo que a algunos le parezca”.
Sánchez empezó su discurso recordando las palabras de Miguel Delibes cuando en 1975 se incorporaba como miembro de la Real Academia de la Lengua. En aquella ocasión, el escritor vallisoletano aseguraba, como recordó el secretario federal del PSOE, que “los grandes desafíos son propios de nuestro tiempo”. Según Sánchez, en este tiempo es necesario es necesario reorientar el pensamiento económico hacia un desarrollo sostenible. Hablar de esto último no solo supone lo que llamó «transición ecológica que ayude a pensar en un futuro» sino también hablar de las condiciones de vida de los ciudadanos.
Respecto a la posibilidad de llegar hasta el final en la aplicación del artículo 155, como le preguntaron los protagonistas, Sánchez insistió en que cree que «lo sensato por parte del PSOE es no adelantar hipótesis. Nosotros hemos dicho que hay que restituir la legalidad vigente y a partir de ahí, hablar de muchas cosas, pero ese debe ser el primer paso».
Finalmente, y ante la posibilidad de mostrarse optimista en una situación tan compleja como la que se está viviendo desde hace unos meses, Pedro Sánchez reivindicó que si hay algo que el PSOE tiene claro es que «este conflicto, solo se va a resolver desde el diálogo político pero antes hay que reordenar una situación que está dislocada. Desgraciadamente el Gobierno no nos ha hecho mucho caso en los últimos años y ahora ya estamos hablando de una cuestión de convivencia pero nuestra obligación como políticos es ser consciente de la gravedad de esta crisis, aunque hay algunas certezas». Entre estas últimas valoró el hecho de que «dos partidos políticos (PP y PSOE) que discrepan tanto estemos unidos en la convivencia. Esto tiene que dar tranquilidad a la sociedad española».