• El torero Enrique Ponce entregó a Doña Elena el X Premio Taurino ABC en nombre de los aficionados, galardonados en esta edición por mantener viva la pasión por el arte de los toros

Su Alteza Real la Infanta Elena recogió ayer el Premio Taurino ABC, que celebró su décimo aniversario, en nombre de los aficionados y en reconocimiento a la ilusión, la pasión, la fidelidad, el respeto y el esfuerzo de toda la afición taurina.

“ABC cumple este año 115 años de vida. Y a lo largo de su historia ha mantenido una defensa a ultranza de la fiesta de los toros”, así abrió Catalina Luca de Tena, presidenta-editora de ABC, la velada en la que resaltó “el trascendental papel que desempeñan los aficionados a los toros” y ensalzó el apoyo de la Infanta Elena “con su fiel asistencia a muchas plazas”.

Luca de Tena lamentó que “ser aficionado a los toros se ha convertido en una actividad de riesgo por los inciviles actos de muchos antitaurinos que no respetan una actividad reconocida como uno de los grandes valores del patrimonio cultural español”, pero aseguró que mientras los aficionados sigan sintiendo esa “ilusionada pasión, ningún ataque podrá prevalecer”. Aprovechó la ocasión para destacar los valores que encarnan los aficionados: “Profundo respeto al toro y al torero, conocimiento de la técnica, sensibilidad estética, educación y criterio, entre otros”.

Seguidamente, el torero Enrique Ponce hizo entrega del galardón a la S.A.R. la Infanta Elena, quien agradeció en su nombre y en el de la afición “a la que tengo el honor de representar”, a ABC por su “apoyo a la Fiesta y al jurado de estos premio, por otorgarnos este reconocimiento”.

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“Respeto las opiniones de cada cual, y por eso me siento orgullosa de querer y de apoyar, en la medida de mis posibilidades, el espectáculo de la Tauromaquia. Amarlo es, sin duda, amar en una de sus muchas y riquísimas facetas a esta España donde todos cabemos en enriquecedora convivencia, asentada en el respeto mutuo”, afirmó la Infanta.

Doña Elena, que ha heredado la afición taurina de su familia, habló orgullosa sobre ello: “El arte de la tauromaquia es el lugar de encuentro de un maravilloso espectáculo. El torero, la gente de la plaza, los aficionados, el toro; todos se reúnen en la plaza y se produce una obra de arte viva en la que todos participan activamente de una u otra forma”. La Infanta no quiso despedirse sin tener un “recuerdo especial” para Victorino Martín Andrés, que falleció el año pasado y que tanto hizo por nuestra Fiesta”.

Presidido por Javier Benjumea, el jurado estuvo compuesto por José María Álvarez del Manzano, Andrés Amorós, Albert Boadella, Pilar González del Valle, José Ramón Márquez, Victorino Martín, Joaquín Moeckel, María Dolores Navarro, Juan Antonio Ruiz «Espartaco» y François Zumbiehl.

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El acto, que se celebró en la biblioteca de ABC y contó con el patrocinio de Nautalia Viajes y Plaza 1, reunió a los toreros, Enrique Ponce, Juan Antonio Ruiz ‘Espartaco’, Morante de la Puebla, Curro Romero, Pablo Lozano, Roberto Domínguez, Ortega Cano, Andrés Roca Rey, Ginés Marín, Cristina Sánchez, Alberto López Simón, Raúl Gracia ‘El Tato’ y Eduardo Dávila Miura, entre otros. También los ganaderos Victorino Martín, Antonio Miura, Victoriano del Río, Álvaro Domecq Romero y Samuel Flores, entre otros.

Asimismo, asistieron al encuentro la ministra de Defensa, Mª Dolores de Cospedal; y el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido. Además de diferentes representantes del ámbito de la cultura, la política y la empresa como Adolfo Suárez Illana, Fernando Ruiz, Esperanza Aguirre, Edurne Uriarte, Isabel San Sebastián, Juan Manuel de Prada y José María Carrascal.

En ediciones anteriores, el premio recayó en los matadores Miguel Ángel Perera, Sebastián Castella, Enrique Ponce, José Mª Manzanares y su cuadrilla, el ganadero Victorino Martín Andrés, el torero Manuel Jesús «El Cid», la ganadería Miura, Juan Antonio Ruiz ‘Espartaco’ y Alberto López Simón y, en la edición anterior, a Morante de la Puebla.